En las grandes ciudades, los atascos son una realidad que muchos conductores enfrentan a diario. Estos retrasos pueden aumentar el nivel de estrés y frustración a la vez que tienen un impacto negativo en el medioambiente. Frente a este contexto, hay algunas medidas que se pueden tomar para evitar los atascos y circular con mayor eficiencia y fluidez.
Con el aumento de los coches, la congestión del tráfico se ha convertido en una preocupación creciente para muchas personas que diariamente se encuentran con esta situación. A continuación se detallan algunos consejos valiosos para implementar en las grandes ciudades.
La tecnología es una gran aliada en las ciudades colapsadas por el tráfico. Existen muchas aplicaciones que permiten planificar la ruta previo a la conducción. Muchas de ellas analizan el tráfico en tiempo real y señalan cuál es la ruta más rápida. La aplicación más conocida para esta función es Google Maps, pero también existen otras como Waze, la app de la Dirección General de Tráfico, entre otras. La gran mayoría de estas aplicaciones son gratuitas y permiten tener un panorama anticipado de las vías y carreteras.
Las ciudades con mucha población, cuentan con horarios punta en los que cotidianamente hay una demora en el tráfico debido a la congestión y la gran cantidad de gente que se está moviendo hacia el trabajo, o llevando a los niños a la escuela. Este horario no es el mismo en todas las ciudades, pero generalizando, entre las 8 y 9 de la mañana y entre las 5 y las 7 de la tarde, es cuando se producen los mayores atascos en las grandes ciudades.
El consejo es tratar de evitar esos horarios de mayor congestión. Puede ser que saliendo antes de lo habitual de casa se logre evitar gran parte del atasco. Otra opción es que luego del trabajo, se realice otra actividad, para esperar a que el horario punta se descongestione.
Usar el transporte público es otra de las opciones para evitar el estrés de los atascos en la ciudad. De esta forma no se pierde tiempo buscando aparcamiento, y, en caso de ir en tren o metro, las retenciones del tráfico se evitan completamente. En esta opción hay que tener en cuenta que también existen horas punta en el uso del transporte público, donde hay que lidiar con personas y empujones. Pero en definitiva es una forma de asegurarse de llegar a tiempo a destino.
El transporte público es una opción ideal para muchas personas, ya que permite alcanzar el destino al mismo tiempo y a un menor coste, sobre todo cuando se utiliza el metro o trenes de cercanías.
Otra opción que permitirá evitar los atascos por completo es usar bicicleta. Puede ser una bicicleta propia o los servicios de renta de bici que cada vez más ciudades están poniendo en práctica. Mediante una cuota es posible acceder a bicicletas compartidas repartidas en varias estaciones en la ciudad. Es posible coger una cerca del domicilio y luego dejarla en una estación cerca del trabajo. Esta opción es una buena solución cuando hay que realizar desplazamientos cortos.
El uso de una moto puede ser otra forma de lidiar con los atascos. Este tipo vehículo, al ser de menor tamaño, permite una movilidad más rápida dentro de las ciudades.
Algunas ciudades, como Barcelona, cuentan con una zona exclusiva para las motos, más adelante en los semáforos. Asimismo, en la mayoría de las ciudades su aparcamiento es gratuito en parkings especiales para motos. En el caso de Madrid, las motos pueden compartir carril con los autobuses y taxis, agilizando aún más el trayecto.
Esta opción de transporte es más ágil y económica, pero tiene sus contras. Solo es posible llevar a un pasajero, y en los días fríos o de lluvia su utilización implica mojarse o pasar frío.
Evitar los atascos en las grandes ciudades es posible, solo hace falta un poco de planificación y precaución. Con estos consejos en mente es posible evitar el tráfico y disfrutar de viajes más rápidos y fluidos.
