La Dirección General de Tráfico (DGT) de España se prepara para implementar un cambio normativo trascendental en el año 2024, marcando un hito significativo en el ámbito de los vehículos con autonomía nivel SAE 4 y 5.
Susana Gomez, subdirectora general adjunta de vehículos de la Dirección General de Tráfico (DGT) de España, tiene previsto un paso crucial hacia el futuro de la conducción con la aprobación, en 2024, de un real decreto que establecerá los requisitos técnicos para la circulación de vehículos autónomos de niveles SAE 4 y 5, con sistemas de automatización completa.
Como hemos indicado, estos niveles implican una automatización completa, permitiendo a los vehículos circular sin supervisión humana. Seguramente te preguntarás que significa un nivel SAE 4 y 5, por ello, a continuación hablaremos sobre esto.
Los niveles 4 y 5 en el sistema de clasificación SAE (Society of Automotive Engineers) se refieren a diferentes grados de autonomía en coches. Estos niveles describen el nivel de automatización del automóvil y la necesidad de intervención humana durante la conducción.
Aquí hay una breve descripción de cada nivel:
Estas intenciones fueron anunciadas por la subdirectora general adjunta de vehículos, en el marco de la presentación del Barómetro del Vehículo Autónomo y Conectado de Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC), resaltando la necesidad de equiparar el sistema de conducción autónoma con la figura del conductor, tal como se ha realizado en países como Alemania o Francia.
Este cambio normativo, enmarcado en la ley de tráfico vigente desde 2022, buscará establecer las bases para la circulación segura de vehículos autónomos en España. Se espera que el real decreto defina las responsabilidades en casos de infracciones o accidentes causados por errores del sistema autónomo, determinando si estas recaerá en el propietario del vehículo o en el fabricante y también los principales requisitos técnicos para su fabricación.
La ANFAC, representada por su director general Jose Lopez-Tafall, señala que aunque la tecnología ya permite la conducción autónoma, la implementación real está condicionada a un marco regulatorio y a la aplicación efectiva más allá de proyectos experimentales que debe llevar adelante el gobierno español.
Desde la DGT, se destaca su interés por el despliegue del vehículo autónomo en España, priorizando la seguridad y evitando accidentes. Con lo cual se duda en que el año próximo se puedan ver coches con nivel SAE 5 de autonomía en las carreteras españolas.
Aunque tres de cada cuatro modelos en venta cuentan con un nivel SAE 2, y el máximo nivel disponible en España es el SAE 3 (presente en el 18% de los modelos), el informe de ANFAC indica que la realidad de la conducción autónoma en el país avanza a un ritmo gradual.
Con esta posible reforma para el año próximo, la DGT se posiciona como pionera, en Europa, en la adopción de la conducción autónoma con niveles SAE 4 y 5, fomentando la seguridad, la innovación y la adaptación a los desafíos futuros de la movilidad en las carreteras españolas.
