La industria automovilística está en constante evolución, impulsada por avances tecnológicos que buscan mejorar la seguridad y eficiencia de los vehículos. A medida que la tecnología avanza, algunos componentes, dispositivos y mecanismos tradicionales de los coches están destinados a desaparecer. En este artículo, explicaremos cuáles son estos elementos que pronto se verán reemplazados por soluciones más modernas.
La rueda de repuesto ha sido un compañero constante en los maleteros de los automóviles durante décadas. Sin embargo, su importancia está disminuyendo gracias a tecnologías como los neumáticos “run flat” y los líquidos selladores. Estas innovaciones permiten a los conductores llegar a un taller para reparar una llanta pinchada sin necesidad de cargar una rueda de repuesto. Incluso la rueda de galleta, una versión más compacta, está cediendo terreno. La mayoría de los automóviles nuevos ahora incorporan kits de reparación en lugar de ruedas de repuesto, lo que ahorra espacio en el maletero.
Con la llegada de la electrificación, los motores de combustión interna están contando sus días. Se estima que para el año 2050, estos motores térmicos deberían haber desaparecido en los países más avanzados en cuanto a tecnología automotriz. Si bien algunos países y continentes podrían tardar más tiempo en eliminarlos por completo, la tendencia hacia la electrificación es innegable.
Los tradicionales triángulos de emergencia utilizados para señalizar averías en carretera están siendo reemplazados por una solución más avanzada: Las balizas V16. Este innovador dispositivo se está convirtiendo en la elección preferida, ya que ofrecen una mayor visibilidad, reducen los riesgos y permiten la conexión en tiempo real con las autoridades de tráfico. En España, desde el año 2026, el uso de las balizas V16 será obligatorio, dejando a los triángulos sin validez.
Hoy en día, la mayoría de los automóviles vienen equipados con elevalunas eléctricos en las cuatro puertas. Aunque todavía se encuentran manivelas manuales en las puertas traseras de algunos modelos más económicos, esta característica también está destinada a desaparecer en los próximos años. La comodidad de los elevalunas eléctricos ha hecho que los manuales sean cada vez menos comunes.
Si bien muchos conductores han considerado la caja de cambios manual esencial para una conducción deportiva, este componente está en peligro de extinción. Países como Estados Unidos han optado por reemplazar las cajas de cambios manuales por las automáticas, que son más rápidas, precisas y eficientes. Además, contribuyen a un menor consumo de combustible.
Las antiguas antenas retráctiles para la recepción de radio están quedando obsoletas. Las antenas actuales son más pequeñas y suelen estar instaladas en el techo del automóvil, a menudo con formas aerodinámicas, como aletas de tiburón. Estas antenas mejoran la recepción de señal y también se utilizan para el posicionamiento GPS en los sistemas de navegación. Algunos modelos avanzados incluso integran las antenas en el parabrisas, haciéndolas prácticamente invisibles.
Los sistemas de apertura sin llave son cada vez más comunes y económicos de implementar en los coches. Esto significa que la tradicional llave de arranque tiene sus días contados. La conveniencia de abrir y arrancar el vehículo con la llave en el bolsillo es una ventaja significativa. Sin embargo, la pérdida de este dispositivo puede resultar costosa en comparación con hacer una copia de una llave tradicional.
Con la llegada del freno de estacionamiento eléctrico, los vehículos modernos están eliminando la palanca de freno de mano clásica. Esta tecnología no solo es más eficiente, sino que también libera espacio entre los asientos. El espacio adicional se usa para crear compartimentos de almacenamiento más grandes o para ubicar otros controles y dispositivos, como las ruletas giratorias que manejan el sistema de infoentretenimiento.
Los frenos de tambor, que eran comunes en coches económicos, están en declive. Los frenos de disco son más efectivos y compatibles con sistemas de seguridad avanzados, por lo que cada vez se encuentran menos modelos que utilizan frenos de tambor. Además, cumplir con las normas de seguridad más rigurosas es complicado con este tipo de frenos.
Las luces LED han ganado terreno tanto en los faros delanteros como en los pilotos traseros de los coches. Estas luces ofrecen una mayor duración y una iluminación más intensa, al tiempo que consumen menos energía. Aunque el costo de reemplazar las luces LED es más elevado que el de las halógenas, la eficiencia y la durabilidad que ofrecen las hacen una elección lógica a largo plazo.
La dirección hidráulica tradicional está siendo reemplazada por la dirección eléctrica, que no afecta al consumo de combustible. Incluso existe una tecnología más avanzada, denominada “drive by wire”, que no requiere una conexión mecánica entre el volante y las ruedas, lo que simplifica aún más el diseño de los automóviles.
La evolución tecnológica está transformando la industria automovilística y llevando a la desaparición gradual de componentes tradicionales en favor de soluciones más avanzadas. Estos cambios no solo mejoran la eficiencia y la seguridad de los automóviles, sino que también influyen en la estética y la comodidad de los vehículos modernos. A medida que la tecnología avanza, es probable que sigamos viendo la desaparición de más elementos familiares de los coches.
